Por: Eudomar Ramirez de MOVE.RECOVER

Fisioterapeuta.

Especialista en sport recovery y readaptación deportiva.

Si quieres comenzar a practicar running debes saber que cada corredor cuenta con un tipo de pisada diferente y que resulta de vital importancia conocer cómo es la tuya.

De esta manera, podrás conocer qué tipo de zapatillas son las más adecuadas de acuerdo con tu morfología, minimizando los riesgos de lesiones.

En este artículo vamos a conocer los diferentes tipos de pisadas para optimizar tu entrenamiento.

Los nombres atribuidos a cada pisada vienen dados por el modo en el que se comportan las articulaciones durante la biomecánica de la marcha, dependiendo del ángulo que existe entre el tobillo y el suelo en el momento de dar la zancada cuando el pie impacta contra el suelo.

Es importante tener en cuenta estos factores ya que pueden desencadenar lesiones osteoarticulares, musculares y ligamentosas.

Tienes que saber que existen tres tipos de pisada. Estas son: pisada neutral, pisada pronadora y pisada supinadora.

Cada una de estas tiene elementos propios y únicos que hacen que cada corredor tenga una manera de correr muy particular.

PISADA NEUTRA: LA MÁS COMÚN EN EL RUNNING.

Tal y como su nombre sugiere, la PISADA NEUTRA es un tipo de pisada donde la biomecánica del tobillo no se inclina hacia ningún costado, por tanto, el ángulo se mantiene de forma estable; con el apoyo en la parte delantera del pie, en el talón y en el medio. La pisada es recta y así se distribuye mejor el peso. El apoyo del pie se distribuye de manera uniforme, tanto en la parte externa, como interna del pie. A la hora de correr o andar el cuerpo se apoya completamente sobre la superficie del centro del pie. De esta manera, el pie no sufre ningún desbalance y la pisada es prácticamente plana.

PISADA PRONADORA:

Este tipo de pisada es otra de las más comunes entre los corredores.

Se trata de una pisada que cuando se impacta en el suelo, el tobillo se inclina ligeramente hacia la parte interna del pie; lo que significa que el empuje es hacia el interior del pie, al momento de apoyarse. Esta es la razón por la que el desgaste en la suela se presenta en su borde interno.

Esta pisada tiene algo particular y es que en realidad el pie está diseñado para pronar y absorber la presión derivada de la fuerza de la gravedad. De no ser por este movimiento amortiguador del pie, este se rompería, por tanto, necesitamos cierto grado, no exagerado, de pronación en nuestro pie.

Hay distintos tipos de pronación en función a los grados de inclinación de la articulación talocrural o mejor conocida como articulación del tobillo.

De 1 a 4 grados es considerada una pronación natural y leve, ya que es una compensación que utiliza el pie para amortiguar la pisada.

De 4 a 10 grados es una pronación moderada, dónde el pie cede un poco más de lo que debería.

Más de 10 grados ya se considera una pronación severa, dónde el tobillo cede exageradamente hacia el interior.

PISADA SUPINADORA

En este caso, la pisada supinadora es aquella en la que el corredor inclina el tobillo hacia el exterior, cuando está en contacto completo con el suelo. Este tipo de pisada es muy poco frecuente y afecta a un 3% de los corredores; sobre todo se da en personas que tienen un arco plantar muy pronunciado. Existen diferentes grados de supinación y, cuanto mayor sea el grado, más problemas se pueden experimentar a la hora de practicar. El supinador suele presentar dolor en el tendón de Aquiles, así como en la cara externa de las rodillas. También son candidatos para sufrir esguinces, debido a que tienen una menor estabilidad.

¿Cómo saber cuál es nuestro tipo de pisada y que zapatilla es la más acorde?

Hay varios dispositivos para realizar un estudio exhaustivo del tipo de pisada, basados en lo que se llama un sistema de presiones, donde el corredor se coloca sobre una superficie o plataforma plana, que va captando la fuerza que se ejerce sobre la misma. Esta plataforma evalúa las presiones en una posición estática y dinámica. Con esto se logra identificar con qué zona del pie el corredor tiene mayor o menor presión. Este estudio funciona también para identificar aquellos corredores que tienen un puente muy levantado, que no toca el suelo, conocidos como los famosos pies planos.

Conocer el tipo de pisada que tienes es importante a la hora de escoger tus zapatillas de running; y es que dependiendo de la tendencia que tu cuerpo tenga al salir a correr, se recomienda una zapatilla que te ayude a equilibrar la presión que ejerce el cuerpo.

Hay miles de marcas de zapatillas en el mercado para los diferentes tipos de pisadas, sin embargo, en esta oportunidad te voy a recomendar la línea de zapatillas BROOKS, las cuales están diseñadas para cualquier distancia, sin importar tu peso o estatura; solo preocúpate por poner especial atención a tu pisada, teniendo en cuenta toda la información que te he dado.

Zapatillas para pisada Neutra

Si eres un corredor con pisada neutra, puedes escoger una amplia variedad de opciones de calzado para correr. En general, busca un tenis con buena amortiguación y soporte que proteja tus articulaciones, así como una excelente comodidad al correr. Te recomiendo buscar opciones como: ghost, glycerin, levitate, trace o hyperion.

Zapatillas para pisada pronadora

Te recomiendo buscar zapatillas con un soporte en el arco para poder amortiguar el golpe y regresar el soporte del pie al centro. Los siguientes modelos te aportan esa amortiguación soporte y estabilidad que necesitas. Estas pueden ser adrenaline GTS 22, glycerin GTS 20/ glycerin sealthfit GTS 20, levitate GTS 5, o launch GTS 9.

ZAPATILLAS PARA PISADA SUPINADORA

Es importante que busques zapatillas con un buen soporte que ofrezca estabilidad. Para este tipo de pisada te recomiendo el calzado tanto para neutro como para pronador. Puede ser cualquiera de ambos, dependerá de cada persona y qué tanto soporte necesites, dependerá de lo que arroje tu prueba de pisada. Adicional a las opciones que te mencione anteriormente, también están estas opciones launch y revel.